Un país para ricos

Tenemos Petróleo, esmeraldas, carbón, banano, café; además somos ricos en hidrografía, fuertes en textiles y muchos otros productos más.

Sin embargo, al momento de consumir lo que nosotros mismos producimos, “nos damos el lujo” de pagar precios elevados por ellos, como si los importáramos.

Por ejemplo, el precio del barril del petróleo ha bajado ostensiblemente y así mismo el precio de la gasolina. En Estados Unidos el galón de gasolina oscila entre los 5.000 y 5.500 pesos pero como Colombia está diseñado para gente adinerada, aquí se pagan 8.500 pesos.

El colombiano tiene “tanto dinero ahorrado” que no es necesario tener sueldos justos, por eso nos conformamos con un salario mínimo de 644.350 pesos.

“Tenemos tanto dinero” que lo dilapidamos y les pagamos a los Senadores 39 salarios mínimos, En Japón un Senador gana dos salarios mínimos, en Canadá 8 salarios mínimos y la lista continúa. El dato es más indignante cuando de nuestro bolsillo por cuenta de los impuestos, jubilamos a estos servidores públicos con sueldos astronómicos; con razón hay consenso entre los políticos de este país para subir el sueldo de ellos mismos y no lo hay para subir el de los demás colombianos.

“Tenemos tanto dinero” que pagamos los peajes más elevados de la región, a los camioneros les toca transitar por vías en mal estado, pagando gasolina costosa y peajes igualmente costosos, ¿por qué? Pues porque este país está hecho para los ricos.

Un puente, un túnel o una carretera es más costoso construir que en muchos otros países, todo por cuenta del tiempo que se dilata, el dinero debajo de la mesa, la adjudicación a los amigos del gobierno, la vulgarmente llamada tajada……. Todo un sinnúmero de maromas y peripecias que muchas veces terminan en algo más vergonzoso y es que el proyecto hay que volverlo a hacer porque quedó mal, ah pero no hay problema, “plata” es lo que hay.

Nos damos el “lujo” de no proveer educación y salud de calidad a los departamentos ricos en minerales de nuestro país.

Entonces, ¿por qué se mueren de hambre los niños en Chocó si son ricos? ¿Por qué mueren nuestros niños Wayú en nuestra exuberante Guajira?

A los campesinos los enviamos a vivir a las ciudades en casas improvisadas, sin acueducto y sus hijos crecen en la descomposición social producto de nuestra “riqueza”.

El café es la bebida número uno en el mundo pero como el gobierno tiene tanto dinero entonces desaprovecha la oportunidad de dignificar a los caficultores y firma tratados de libre comercio sin proteger a sus propios productores porque hay que dar el pantallazo internacional, después de todo los ricos deben codearse con los ricos.

De los jóvenes que están por debajo de la línea de la pobreza pocos se gradúan de la universidad, por ende es más factible ver a las familias adineradas en los cargos más importantes de la sociedad colombiana, recuerden que este es un país para ricos, los pobres tienen la puerta cerrada, son importantes en época de elecciones y para pagar impuestos pero en retribución obtienen sueldos miserables y productos costosos.

Las cárceles, hacinadas y abarrotadas, están llenas de gente pobre porque como este es un país para ricos, los que tienen dinero son amparados por un sistema judicial decadente y permisivo ─ El país de la casa por cárcel.

Ser de mejor familia está en nuestra sangre, nos acostumbramos a eso, le hemos permitido a los gobiernos que abuse de nosotros porque “hay que tener relaciones e influencias” para que no me quiten el cargo, así sea catapultando a quienes nos han desangrado históricamente, tenemos genes tramposos, convivimos con los embelecos que nos matan y caminamos en círculos en vez de avanzar, nos importan cosas como la fama de los colombianos por el mundo y descuidamos la educación, la salud, el futuro de nuestros hijos, marchamos si nos dicen que marchemos pero nada hacemos por iniciativa propia, nos acostumbramos a ver pacientes en camillas moribundos y agonizantes, a ver los niños mendigando, los ladrones en las esquinas, los corruptos legislando, las madres cabeza de familia desamparadas, el periodismo amangualado, los entes de control politizados, nuestros campesinos desplazados, nos comemos entre todos, cada quien hace parte de un bando, simplemente no nos duele este país, después de todo este es un país para ricos.